lunes, 28 de octubre de 2013

Presentan nuevo documento legal de apoyo al Habeas Corpus para los Cinco (+ Documento)

El lunes, 21 de octubre, Bill Norris, abogado de los Cinco Cubanos para Ramón Labañino, presentó un nuevo documento legal, una moción complementaria añadiendo al voluminoso expediente en apoyo del recurso de Habeas Corpus para Labañino. Sus argumentos se aplican a los tres restantes miembros de los Cinco Cubanos que siguen apelando. Uno de los miembros de los Cinco Cubanos — Fernando González — optó por no continuar su recurso de hábeas corpus, con el fin de no retrasar su liberación en febrero de 2014. Si fuera a continuar sus apelaciones legales, su regreso a Cuba podría retrasarse por meses o años. La nueva moción destaca la preocupación del mismo juez durante el juicio de los Cinco, que, según sus propias palabras, no podía proteger al jurado de la publicidad adversa. El 16 de febrero de 2001, la jueza Joan Lenard pasó un dictamen y protocolo de Ley, en respuesta a la petición de Gerardo Hernández solicitando la ejecución de la orden de censura a los testigos del juicio y a los medios de comunicación. La nueva moción complementaria cita a la jueza Joan Lenard, quien declaró durante el juicio, el 16 de febrero de 2001: “… la Corte considera, sin embargo, que ni siquiera la instrucción más enfática ni el examen preliminar de preguntas podrán proteger a los jurados de los titulares de prensa o declaraciones ex parte y de la conducta de los testigos o de los abogados que sin duda recibirán una amplia cobertura. Desde que comenzó el juicio, este caso ha sido el pan de cada día para la prensa y los medios de comunicación locales”. . La moción de Norris recuerda a todas las partes que los propios Dictámenes Jurídicos de la jueza y órdenes judiciales contradice fuertemente la afirmación de los fiscales de Estados Unidos de que las instrucciones del juez al jurado débil — de no leer o ver las noticias cuando fueran a casa todas las noches durante siete meses — no fue suficiente para proteger el jurado de los medios.

domingo, 13 de octubre de 2013

Consolida trabajo Grupo de Transplante de Holguín

El Grupo de Transplante de Holguín consolida su quehacer este año al realizar cuatro injertos renales en apenas 72 horas, con los cuales completó la cifra de 28 hasta el momento. De esta manera la provincia supera en dos el total de intervenciones de ese tipo efectuadas en el 2012, por lo cual existen perspectivas de sobrepasar las 30 antes de cerrar diciembre, informó el doctor Roberto Cruz Mayo, jefe del Servicio de Transplante del hospital clínico quirúrgico Lucía Íñiguez. Acerca de las últimas cirugías hechas entre lunes y miércoles de la semana anterior, destacó que fueron beneficiados cuatro holguineros que padecían insuficiencia renal crónica por lo cual recibían tratamiento de hemodiálisis. Los pacientes evolucionan satisfactoriamente y con muy buen estado de ánimo general y, sobre todo optimistas, de que mejora su calidad de vida en lo adelante. “El equipo holguinero es el que más implantes renales hace anualmente en Cuba desde los últimos 10 años, unos 30 como promedio en 12 meses y la supervivencia del órgano está por encima del 85 por ciento, como en países desarrollados”, destacó Cruz Mayo. Otros de los méritos del grupo multidisciplinario es que los propios cirujanos integrantes del team médico realizan la extracción e implantan el órgano, lo que ofrece menos margen a que se desechen riñones y sean mínimas las complicaciones quirúrgicas. Alejandro Guerrero González, director general de la institución, dijo que tienen como propósito sobrepasar ampliamente los 30 transplantes en el 2013, una manera de festejar el aniversario 15 de la puesta en marcha del centro en el mes de noviembre.

Bloqueo de EE.UU. afecta industria cubana del níquel

A más de 89 millones de dólares ascienden las afectaciones del bloqueo estadounidense a la industria cubana del níquel, en la etapa comprendida entre el primero de marzo de 2012 y similar fecha del presente año. Entre las causas de esos daños figura la negativa de importación a Estados Unidos de todo tipo de producto elaborado total o parcialmente con níquel cubano, aunque fuese fabricado en terceros países. Debido a esa cruel política se ha mantenido la creación de canales de distribución más costosos, la utilización de intermediarios, la suscripción de contratos encubiertos y la aplicación de descuentos diferenciados. El bloqueo impide la entrada de productos con níquel y cobalto cubanos en el mercado norteamericano, y se estima que se pierden cinco centavos por libra de níquel -lo que en términos globales son millones de dólares- por pagar mayores facturas de intermediación.